La hidratación es una de las reglas más importantes del cuidado de la piel. Después de todo, una piel hidratada es una piel feliz. Pero ¿qué pasa cuando tu piel sigue sintiéndose seca y deshidratada incluso después de usar lociones, cremas y otros productos hidratantes? Aplicar crema hidratante en el cuerpo y el rostro puede parecer fácil, pero eso no significa que no exista una técnica. Además de aplicar la crema hidratante correctamente, también debes asegurarte de que tu piel esté preparada para recibir la hidratación necesaria y de usar productos adecuados para tu tipo de piel. ¿No sabes por dónde empezar? Empecemos con lo que no debes hacer.
Error: Limpiar demasiado la piel
Aunque quieras que tu piel se sienta completamente limpia y libre de residuos, la limpieza excesiva es uno de los peores errores que puedes cometer. Esto se debe a que altera el microbioma de tu piel: las bacterias microscópicas que influyen en la apariencia y la textura de nuestra piel. La Dra. Whitney Bowe, dermatóloga certificada, revela que lavarse la piel con demasiada frecuencia es el principal error de cuidado de la piel que observa entre sus pacientes. "Si sientes la piel tirante, seca y reluciente después de la limpieza, probablemente significa que estás eliminando algunas de tus bacterias beneficiosas", afirma.
Error: No hidratar la piel húmeda
Realidad: Hay un momento ideal para hidratar la piel, y es cuando aún está húmeda, ya sea por lavarte la cara o por usar otros productos para el cuidado de la piel como tónicos y sérums. "La piel tiene más hidratación cuando está húmeda, y las cremas hidratantes funcionan mejor cuando ya está hidratada", explica el Dr. Michael Kaminer, dermatólogo y cirujano estético certificado. El Dr. Kaminer añade que después de ducharse, el agua se evapora de la piel, lo que puede dejarla más seca. Después de la ducha o el baño, séquese la piel con palmaditas suaves y use inmediatamente la loción corporal de su elección. Nos encantan las lociones ligeras en los meses más cálidos y las mantecas corporales cremosas durante todo el invierno.
Error: usar la crema hidratante incorrecta para tu tipo de piel
Siempre que elijas un nuevo producto de cuidado de la piel para añadir a tu rutina, debes usar uno formulado específicamente para tu tipo de piel. Si tienes piel seca y usas una crema hidratante formulada para piel grasa o con imperfecciones, es probable que tu piel no responda como te gustaría. Si tienes piel seca, busca una crema hidratante que te proporcione una dosis extra de hidratación, nutrición y confort al aplicarla. También debes asegurarte de revisar la etiqueta del producto para ver los ingredientes hidratantes clave, como ceramidas, glicerina y ácido hialurónico. Formulado con tres extractos de algas brasileñas ricos en nutrientes, este producto ayuda a nutrir y mantener los niveles naturales de hidratación de la piel.
Error: Saltarse la exfoliación
Recuerda que una exfoliación suave es esencial en tu rutina semanal de cuidado de la piel. Puedes elegir entre exfoliantes químicos formulados con ácidos o enzimas, o exfoliantes físicos, como exfoliantes y cepillos secos. Si no exfolias, puedes acumular células muertas en la superficie de la piel y dificultar el uso de lociones y cremas hidratantes.
Error: Confundir piel deshidratada con piel seca
Otra razón por la que tu piel podría seguir sintiéndose seca después de la crema hidratante es porque está deshidratada. Aunque los términos suenan parecidos, la piel seca y la piel deshidratada son en realidad dos cosas diferentes: la piel seca carece de grasa y la piel deshidratada carece de agua.
“La piel deshidratada puede deberse a la falta de agua o líquidos, así como al uso de productos irritantes o resecantes que pueden despojarla de su hidratación”, explica la Dra. Dendy Engelman, dermatóloga certificada. “Busca productos para el cuidado de la piel con ingredientes hidratantes como el ácido hialurónico y mantén tu cuerpo hidratado bebiendo la cantidad recomendada de agua”. También recomendamos comprar un humidificador, que puede ayudar a humedecer el aire de tu hogar y a mantener tu piel hidratada.
Error: aplicar la loción de forma incorrecta
Si te exfolias con frecuencia, usas productos de cuidado facial formulados para tu tipo de piel y aplicas tus lociones y cremas inmediatamente después de la limpieza, pero aún sientes sequedad, puede que se deba a la técnica que usas para aplicar la crema hidratante. En lugar de aplicarla de forma desordenada, o peor aún, frotarla con fuerza, prueba un masaje suave y ascendente. Esta técnica, aprobada por esteticistas, puede ayudarte a evitar tirones en las zonas delicadas del rostro, como el contorno de ojos.
Cómo hidratar correctamente
Prepara tu piel para la hidratación con un tónico
Después de limpiar tu cutis y antes de aplicar la crema hidratante, asegúrate de preparar la piel con un tónico facial. Los tónicos faciales pueden ayudar a eliminar el exceso de suciedad e impurezas que quedan después de la limpieza y a equilibrar el pH de la piel. Los tónicos pueden resecar mucho la piel, así que asegúrate de optar por una opción hidratante.
Utilice un suero antes de hidratar
Los sérums pueden hidratarte y, al mismo tiempo, tratar otros problemas de la piel, como los signos de la edad, el acné y la decoloración. Recomendamos optar por un sérum hidratante como el Hyalu-Aloe Super Hydrating Serum Gel de Garnier Green Labs. Para la piel del cuerpo, considera aplicar una crema y un aceite corporal en capas para retener la hidratación.
Para una hidratación extra, prueba una mascarilla hidratante de noche.
Las mascarillas nocturnas pueden ayudar a hidratar y reponer la piel durante su proceso de regeneración (que ocurre mientras duermes) y dejar la piel luciendo y sintiéndose suave, tersa e hidratada por la mañana.
Hora de publicación: 04-nov-2021